Sesenta y dos carretas de la paz  con romeros de Masaya viajan a una cita más con Jesús del Recate

 

*Una promesa es deuda y María Esterlina la paga desde hace 88 años

 

Miles de feligreses de  Masaya  de las diversas edades  desbordados de fe y alegría, partieron acompañados de filarmónicos a cumplir un año más a sus citas con  Jesús del Recate a quien visitan todos los años en su Santuario en Popoyuapa.

Antes de marchas hubo un momento de recogimiento en el que los romeros oraron ante una imagen de Jesús del Recate para que les guiara en su recorrido hasta Rivas.

Con sus 102 años a tuto, María Esterlina Suazo, tiene 88 años de cumplirle a Jesús del Rescate, “empecé a  viajar desde los 14 años en esta tradición familiar que espero seguir cumpliendo hasta que el Señor me de vida”, dijo.

Originaria del barrio San Juan de Masaya, se sienta en la primera fila. Ora encomendándose a Dios para que su viaje sea exitoso. Ella y  sus acompañantes recibieron productos básicos de parte del gobierno y la alcaldía de Masaya.

Abigail Vallecio Espinoza, es bisnieta de María. Esternina, es la encargada de acompañarla y asegura que la fe en Dios les ha permitido tener salud y repuestas satisfactorias en momentos difíciles.

Juan López, originario de Monimbó es mayordomo de las promesantes de las carretas peregrinas de la Ciudad de Las Flores, su vocación de servirle al prójimo hace asumir su responsabilidad con amor y fe.

Después del acto piadoso y de rogativas por un buen viaje, los peregrinos se enrumbaron hacia las carretas en medio de un ambiente alegre amenizado por la música de vientos. Cada quien ocupa su lugar como Juana Mercado quien acompaña a su mamá, “viajamos a pagar promesa por tener salud”, manifestó.

A los  promesantes  les acompañan como  todos los años, miembros de la  Policía de Masaya quienes van al  al servicio de la población,  garantizando la seguridad de los romeros y de las personas que circulan a diversos departamentos de Nicaragua en sus unidades de transporte.

La caravana de fe  la encabeza Juan López en su coche peregrino. Le sigue el coordinador Julio Medina Téllez. Todos en general reflejan  la alegría y la satisfacción de cumplir una vez más con sus promesas.

El sol el celeste del cielo pareciera también contagiarse de  esa alegría, misma que también inunda a las familias de la Cuna del Folclor que llegaron a despedir a  los fieles devotos que marchan en las carretas peregrinas de la paz a cumplir con la promesa que  un día ofrecieron a Jesús del Recate.